Última actualización: Octubre 2019
La dermatitis del pañal es una erupción dérmica que aparece en la zona de la piel que está en contacto con éste.
Es uno de los problemas más frecuentes y comunes del bebé durante su primer año de vida. Todos los recién nacidos tienen una piel muy sensible y delicada que es extraordinariamente fina y permeable, de ahí que rápidamente pueda verse afectada. Pero si bien ello es un factor que interviene claramente en la presentación del problema, la realidad es que algunos niños parecen ser más propensos que otros a presentar esta clase de dermatitis.
¿CUÁLES son las CAUSAS?
Las principales causas que favorecen la aparición de esta inflamación e irritación, más o menos intensa de la piel son:
- El exceso de humedad producido por la oclusión del propio pañal, que agrava y prolonga el proceso y al mismo tiempo favorece el desarrollo de bacterias y hongos.
- La fricción de la zona afectada por el uso de toallitas con jabones y/o perfumes puede empeorar o favorecer su aparición.
- El contacto prolongado de la zona con la orina y las heces desenboca en una irritación química de la piel, alterando su pH.
- Los cambios en la acidez de las heces durante situaciones como la diarrea o la erupción dentaria.
El resultado de todos estos factores combinados es una agresión continua en la zona, que termina produciendo una alteración de la barrera cutánea. La primera manifestación es el enrojecimiento de las áreas de mayor contacto, que fácilmente se erosionan, y pueden incluso llegar a sangrar y acabar siendo muy molestas y dolorosas para el niño.
Normalmente, las lesiones son evidentes y no dan lugar a dudas en cuanto a diagnóstico, pero pueden asociarse a otras erupciones de la misma zona causadas por dermatitis atópica o dermatitis alérgica de contacto.
Incluso, en otras ocasiones, cuando el problema va además acompañado de sobreinfección, puede dar lugar a un cuadro menos evidente de forma inmediata. Será el pediatra quien, en definitiva, pueda establecer con certeza el diagnóstico.
Actualmente, con el uso de pañales desechables y que además gozan de diseños pensados para reducir los roces, ha disminuido notablemente la frecuencia de presentación de las dermatitis del pañal. Eso sí, siempre que los pañales se vayan cambiando de forma que no se supere su capacidad de absorción, porque entonces el bebé no se mantendría totalmente seco.
¿CÓMO la podemos PREVENIR?
La prevención es la mejor manera de evitar su aparición y consistirá fundamentalmente en evitar los factores irritantes mediante una buena higiene.
- Cambiar al bebé cuando está mojado es una regla adecuada. Mejor cambiarlo después que antes de las comidas, momento en que suele volverse a ensuciar otra vez.
- Por otro lado, también es recomendable el uso de pañales transpirables y no oclusivos, así como el cambio frecuente de pañal.
- Se recomienda, asimismo, realizar la limpieza cuidadosa de las nalgas en cada cambio, con agua tibia o con una leche de limpieza adecuada para esta zona.
- Igualmente, resulta fundamental la aplicación de ungüentos protectores, que actuarán de barrera, y de sustancias hidratantes.
Cuando está ya establecida la dermatitis, también es de gran ayuda quitar el pañal y dejar la zona expuesta al aire libre durante todo el tiempo posible. El pediatra, en cualquier caso, puede prescribir tratamiento tópico para la sobreinfección por hongos o por bacterias.
CONSEJOS
- La humedad cutánea debida al contacto de la orina de los pañales hace que la piel sea más frágil e irritable.
- Para prevenir y tratar la dermatitis del pañal, es fundamental mantener seco y limpio el culete del bebé.
- No se deben utilizar pomadas con antibióticos o con cortisona si nohan sido prescritas por el médico.
- La aplicación de una crema protectora con el cambio de pañal ayuda a prevenir su aparición.
- El farmacéutico os aconsejará sobre los jabones no abrasivos.