La celulitis es una alteración estética de la piel motivada por la alteración del tejido adiposo (hipodermis), que retiene agua, grasas y toxinas de forma anormal, y su evolución puede alargarse durante años.
Trastornos circulatorios, factores hormonales, l’estrés o determinados hábitos posturales pueden estar detrás de la formación o evolución de la celulitis que tan a menudo invade glúteos, caderas y muslos.
Etapas de evolución de la CELULITIS
Se pueden identificar tres etapas principales de evolución de la celulitis:
- En una primera fase, la piel aumenta de tamaño, pero todavía no se aprecia la piel de naranja. Se produce alteración de la permeabilidad capilar, formación de edema y aumento del tamaño de los adipocitos.
- En una segunda etapa, la piel de naranja ya empieza a ser visible. Los adipocitos se aglutinan de forma no homogénea y se forman las fibras de colágeno.
- Por último, en la tercera etapa, se produce un aumento del grosor de la piel, que adquiere un aspecto acolchado y pierde la flexibilidad y la tonicidad. La piel de naranja es visible a simple vista. Las fibras de colágeno encapsulan los adipocitos, dando lugar a los nódulos.
La evolución de la celulitis puede durar varios años, dependiendo de diversos factores. Eso sí, cuanto antes se inicie el tratamiento, más se retardarán los efectos.
FACTOES que favorecen su aparición
Entre los factores que agravan la formación de la celulitis:
- Unos son intrínsecos, como factores hormonales, trastornos circulatorios, herencia, diferentes estados evolutivos, pubertad, embarazo o menopausia.
- Y otros son factores extrínsecos, como dieta desequilibrada, estrés o hábitos posturales.
¿Cómo debe ser el TRATAMIENTO ANTICELULÍTICO?
En cuanto al tratamiento anticelulítico, antes de iniciarlo se debe intentar conocer las causas que originan la celulitis o los factores que coexisten en cada caso en concreto.
- Si existe una verdadera causa hormonal, ésta deberá ser abordada mediante tratemiento médico a la vez que se sigue tratamiento dérmico.
- Si el factor hormonal no se considera causante, el tratamiento debe ir dirigido a mejorar la circulación de retorno y el drenaje linfático, junto a unos buenos hábitos de vida, hacer ejercicio, dieta equilibrada, etc.
El tratamiento de la celulitis debe ser constante y seguido. Se debe continuar aunque la celulitis prácticamente haya desaparecido, porque si no, se volverá a implantar.
Este tipo de tratamiento debe incluir:
- Ejercicio físico, con el que se puede combatir el sedentarismo que provoca la celulitis.
- Sauna, ya que la alternancia de frío y calor actúa a modo de gimnasia vascular.
- Masajes e hidromasajes, que son efectivos en el tratamiento de la celulitis y además pueden reforzarse con la aplicación de alguna crema de tratamiento.
Recuerde
- Seguir una dieta saludable, beber líquidos, evitar el abuso del alcohol y el tabaco.
- Realizar ejercicio y evitar la vida sedentaria.
- Utilizar productos anticelulíticos y la aplicación de éstos mediante masajes