Las calorías nos aportan energía y el balance energético adecuado es la clave para un peso saludable.
La importancia de una alimentación correcta en todas las etapas de la vida y su trascendencia en muchas enfermedades ha provocado un interés creciente para la nutrición.
Y forman parte del vocabulario de la nutrición palabras como calorías, energía y balance energético.
¿Qué es el BALANCE ENERGÉTICO?
Cuando comemos estamos obteniendo energía que después nuestro cuerpo utilizará cuando realizamos ejercicio físico, cuando pensamos, cuando jugamos, cuando caminamos…
El balance energético será pues, la relación entre el consumo de energía y el gasto energético de nuestro cuerpo.
- Balance energético positivo: gastamos la misma cantidad de energía que consumimos durante el día.
- Balance energético negativo: gastamos más energía de la que consumimos.
Existen ciertas situaciones que exigen tener un balance energético positivo como son el embarazo, la lactancia, la infancia, la adolescencia o cuando por algún problema, enfermedad o lesión hay una pérdida de peso importante.
GUÍA DE EQUIVALENCIAS: gramos y calorías
Equivalen a 100 calorías…
VERDURAS | 600 g. de lechuga 350 g. de espinacas 460 g de tomates 220 g. de cebollas 230 g. de zanahorias 115 g. de patatas 570 g. de espárragos 370 g. de coliflor 300 g. de remolacha |
FRUTAS | 200 g. de manzana 100 g. de plátano 200 g. de naranja 250 g. de mandarina 190 g. de pera 230 g. de frambuesas 200 g. de cerezas 200 g. de ciruelas frescas 250 g. de fresas |
CARNES | 80 g. de pollo 37 g. de cerdo 65 g. de ternera 38 g. de pavo |
PESCADOS | 50 g. de sardinas frescas 105 g. de tortilla 44 g. de salmón fresco 110 g. de lenguado 135 g. de gambitas o langostinos |
DULCES O AZÚCARES |
25 g. de azúcar blanco 26 g. de azúcar sin refinar 30 g de miel 36 g. de mermelada 22 g. de cacao sin azúcar 20 g. de chocolate |
BEBIDAS ALCOHÓLICAS |
154 g. de vino negro 165 g. de vi blanco 67 g. de vinos dulces 85 g. de vino espumoso 200 g. de cerveza |
¿Cómo puedo CONSEGUIR un buen BALANCE ENERGÉTICO para un PESO SALUDABLE?
Una alimentación equilibrada, está determinada por la cantidad de los distintos grupos de alimentos que consumimos de acuerdo con las condiciones de cada persona y su entorno sociocultural y económico.
- La alimentación diaria tiene que respetar el uso de los alimentos de proximidad y naturales y consumir alimentos procesados en la menor proporción posible. Debe adecuarse a los gustos y preferencias personales y a los hábitos familiares y culturales, siempre de acuerdo con el nivel de actividad física de cada individuo. La moderación es el secreto, hay que consumir lo que gasta nuestro organismo.
- Mantener el balance energético disminuye el riesgo de enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, algún tipo de cáncer y el envejecimiento prematuro, entre otros.
- Una alimentación equilibrada que provenga de todos los grupos de alimentos permitirá que las reservas de minerales y vitaminas estén dentro de los rangos adecuados, evitando así el riesgo de enfermedades relacionadas con el déficit de éstos, como la anemia o la osteoporosis, entre otros.
- Los alimentos no son buenos o malos. En todo caso será el uso que hacemos el que será correcto o no. Hay que dejar de lado la idea del alimento bueno, malo o que engorda. Así pues, hablaremos de hábitos alimentarios saludables.
- El conocimiento del valor calórico y nutricional que proporcionan los alimentos nos ayudará a conocer la cantidad que tenemos que comer al día, según las necesidades orgánicas.
- Pecar por exceso o por déficit en el consumo de alimentos no es adecuado. La moderación de acuerdo a las necesidades individuales es el éxito para tener unos hábitos alimenticios saludables.
- Tener una buena disciplina respecto a los horarios y comer a menudo (cinco comidas al día) nos ayudará a controlar el hambre y la ansiedad.
- Es importante pensar con antelación los menús de toda la semana para reducir las improvisaciones y la ingesta de comida no necesaria.
- El desayuno tiene que ser la comida principal porque rompe el ayuno y favorece el trabajo del día.
- Tenemos que comer poco a poco, no lentamente pero tampoco deprisa, masticando de forma adecuada sin tragar trozos demasiado grandes, con la finalidad de mejorar la digestión.
- Debemos disfrutar del placer de comer y una buena manera de hacerlo es no distraernos realizando otras actividades como leer, escribir o mirar la televisión.
- Leer las etiquetas de los alimentos envasados nos ayudará a ser conscientes de la aportación nutricional y de energía por porción según el balance energético.