Recibimos mucha información sobre salud y, ésta, cada vez pone más énfasis en la importancia de comer sano con la finalidad de prevenir en salud. Y empezar el día con un desayuno sano, equilibrado y nutritivo que nos aporte la energía suficiente ¡es una buena forma de cumplir con estas expectativas! 😉
Los cereales son una muy buena opción para desayunar, nos aportan energía y son ricos en múltiples vitaminas y minerales, saludables tanto para los adultos como para los niños. Ayudan a equilibrar el nivel de azúcar en la sangre y también son adecuados para tratar problemas digestivos y estomacales.
Los podemos acompañar con leche desnatada o yogurt desnatado y una fruta. El desayuno es la primera comida del día y nos tiene que proporcionar la energía necesaria para empezar la jornada con suficiente empuje. Con este conjunto de alimentos conseguimos cubrir necesidades básicas de nuestro organismo y además fomentamos una dieta saludable y equilibrada.
TIPOS de CEREALES y BENEFICIOS
Hay de muchos tipos, pero los más saludables para el desayuno y que ofrecen energía para todo el día serían los siguientes:
- El centeno entero. Es uno de los mejores cereales. Podemos desayunar una tostada de centeno con mermelada de ciruela, naranja o arándanos. Y la podemos combinar con un zumo natural, o cualquier infusión. El centeno aporta un tipo de fibra dietética con muy pocas calorías y mucha más fibra que el trigo entero. Es rico en vitamina A y ácido fólico. Es ideal para depurar la sangre y para reducir el denominado colesterol malo.
- El trigo sarraceno. Es rico en ácido linoleico (omega 3), minerales como el hierro o el cobre, vitaminas B1, B2, B3, B5 y ácido fólico. Es famoso sobretodo por su alto contenido en magnesio, esencial para la correcta asimilación del calcio. Además actúa como protector hepático, ayudando al hígado a sintetizar vitaminas y a depurar toxinas. El trigo sarraceno, además, activa el metabolismo para que queme grasas, eliminando toxinas y regulando la glucosa en sangre, a la vez que permite reducir el colesterol malo.
- La avena. Es recomendable incluirla en el desayuno, acompañada, por ejemplo, de trocitos de manzana, fresas o uva. Es rica en vitaminas y aminoácidos, ideales para el hígado y el corazón. Es muy rica en fibra, favoreciendo tránsito intestinal y evitando el restreñimiento. Es adecuada para personas diabéticas y dispone de un alto índice de proteínas, perfectas para regenerar los tejidos.
- La cebada. Un desayuno de papilla de cebada con fruta o un pan de cebada es un desayuno saludable. La cebada es uno de los mejores cereales para reducir por completo el colesterol malo. La más saludable es en grano entero.
CEREALES INTEGRALES
Los cereales integrales son una muy buena opción para introducir dentro de nuestra alimentación. Entre éstos se encuentran:
- el arroz integral,
- el trigo sarraceno,
- la escanda,
- el trigo integral,
- el centeno,
- la avena,
- el maíz
- y la cebada.
Los alimentos integrales reducen el riesgo de padecer diversas afecciones crónicas propias de nuestra sociedad. Son un buen ejemplo las enfermedades cardiovasculares, la diabetes tipo 2 y los trastornos gastrointestinales como el restreñimiento, además de afectar también en la evolución de ciertos tipos de cáncer.
Además pueden contribuir a mantener un peso saludable.
¿QUÉ hay que EVITAR?
- Hay diferentes maneras de consumir cereales: semillas, panes, harinas y los clásicos cereales para desayunar que muchas empresas alimentarias comercializan acompañados con otros alimentos. Es aquí donde tenemos que tener especial cuidado, ya que no todos serán igual de saludables.
- Hay que evitar aquellos cereales que tengan colorantes o que estén enriquecidos con azúcar. Son muy atractivos para los niños pero no son recomendables.
- Los cereales acompañados de frutas desecadas suelen tener un alto contenido calórico. En este caso habrá que consumirlos con moderación.
- Los cereales con chocolate o miel también suelen tener mucho azúcar y habría que consumirlos con mucha moderación.